sábado, 26 de noviembre de 2016


SOÑAR




La nostalgia me envuelve, las brumas del gris Otoño apagan los brillos del sol candente.

El cielo se despoja de su vestido azul claro de día y su traje de noche con brillos dorados y resplandecientes por uno, de tonalidades grises y negros, sobrio, como respetando la muerte de la estación estival.

Llega la calma, la melancolía. El sueño.
 Los bosques tornan amarillentos,ocres, rojizos. Las musas bailan un compás de inspiración al cual me invitan a participar y a soñar, con metas imposibles, más, la esperanza perdura y danzo y danzo entre brumas blancas en la espesura del hermoso bosque, donde sus cadentes hojas, al desplazarse al vacío, van dejando escuchar, una nota musical de triste melodía. 
Mientras mis pies se deslizan suaves, las musas me elevan al compás de la  música hacia el cielo donde alcancé la cima más elevada de la montaña y allí las aguas cantarina de los riachuelos desprendidas de las cúspides me bañaron risueñas y alegres bajos su espuma blanca.

Las musas me protegían y con sus alas blancas me deslizaron con suavidad prodigiosa del mundo de los sueños y acomodaron mi mente a mi cuerpo que dormía plácidamente antes de que de nuevo se despertara el alba. Maricarmen.

4 comentarios:

Abuela Ciber dijo...

Bellamente expresado los entires que te acompañan
El otroño acuna mucha nostalgia
Por aca el verano se aceca a pasos rapidos
Buen fin de semana
Cariños

Mª Jesús Muñoz dijo...

Mª Carmen, me encanta el otoño y por ello me gusta la serenidad y la inspiración que pones en tus letras...Todo un placer deslizarse por tu sueño hasta el alba, amiga.
Gracias por tu presencia y tu apoyo.
Mi abrazo y mi cariño, siempre.
M.Jesús

AMALIA dijo...

Muchas gracias por tu amable visita y tu comentario.

Un placer haber llegado hasta aquí y leerte.

Un beso.

Anónimo dijo...

Un placer disfrutar de esta nostalgia, parece que el otoño es la estacion del año en que se añora el calor del amor.
Un abrazo.
Ambar