LUNA, LUNITA

Ay! Lunita clara,

 lunita  llena

ven aquí  abajo

a consolar mis penas,

tú que fuistes testigo

de nuestro amor, de

aquellos besos,

llenos de pasión.

Ven por favor que no puedo

vivir, con tanta amargura

ayúdame a salir de esta

horrible locura.

Que ese, que tanto

 me quiso y tanto me

prometió, se ha ido de

mi vida y solita

me dejó.

Yo que lo amaba,  con locura

que solo veía por sus ojos

y solo hablaba, por su boca,

siento que el mundo me pesa

como si fuera una losa.

Luna,  lunita, ven a darme

tu calor, tú que nos embrujabas

en nuestras noches de amor,

tú que fuistes nuestra cómplice

y  veías mi pasión,

por ese amor indigno

que me dió tanto dolor;

ven, aquí a mi vera y

ayúdame a entender

cómo se puede ir la pasión

y cómo dejar de querer.

Hazme comprender que

tengo que vivir sin él

que se ha ido para siempre

y nunca va a volver.

Ay! luna, lunita clara, ven

y ayúdame a llevar esta carga

e ilumíname con tu cara, esa

que yo veía sonreir

cuando él me besaba,

cómo voy a dormir ahora

si él no está en mi cama.

Luna, lunita mía tienes

que hacerle entender

susurrándole al oído

que nunca jamás

le dejaré de querer