miércoles, 28 de mayo de 2014

Magia





Nos miramos y comprendimos
que se había perdido la magia,
aquella que nos hipnotizaba
que nos atraía como imán,
aquella que nos fundió
 en un mismo universo
donde fuimos uno,
donde el mar nos abrazaba
la luna nos encendía en noches
estrelladas, donde la lluvia
 solo nos acariciaba, donde
nuestras bocas se besaban con prisas
como si al amanecer no hubiera otro día.

Nos miramos y comprendimos que
se paró el reloj de los sentimientos
que se apagó de nuestros ojos el fuego
que la lluvia empapaba y la luna  no brillaba,
que los besos se perdían
 por un mar de  indiferencia que
la magia se alejó y nos dejó
su cara más fría. Maricarmen.






lunes, 19 de mayo de 2014

El Bisabuelo ( 9)



Hoy mi niñino creo que
no iremos al paseo,
 estoy mu cansaino y
no me responde el cuerpo.

Me quedaré en  la mecedora
viendo llegar las cigueñas,
y tú juega ahí solino que yo
tengo dormilera.

Es que al pasar de los años
se me cargaron a la espalda,
por eso estoy encorvado y de dolor
ya no se aguanta.


Jejeje, no me mires con carina
de no comprender ná y no
 me dés las canicas, que no
quiero jugar.


Ainns si es que tu vigor,  lo dejé
yo tan atrás porque aunque no
lo parezca, tambien fuí un zagal.

Hace tanto tiempo ya que la
memoria me falla pero me bebia la vida
con pasión y con ganas.

No había televisión, ni juegos de
esos rarinos que siempre
 tienes en las manos
que te comen el sentío
.

Yo jugaba con un palo y a
 buscar lagartijas,
a subirme a los árboles
con otros niños en pandilla.

Que felices éramos con tan poquino,
ayyy! mi zorronguino, juega tu
ahí  un ratino, cosa chica,
que yo,  voy a echarme ahora
mismo  otra  siestina. Maricarmen,

viernes, 9 de mayo de 2014

Hacia la luz.




Afianzaré la luz en mis retinas,
no dejaré que las sombras
 de la incertidumbre se refleje
en mis pupilas.

Abriré mis labios en franca sonrisa.
no habrá  rictus de tristeza alguna,
sabré resplandecer entre las sombras
malditas y oscuras.

Palparé con mis dedos la piel de
 la esperanza, no cesaré en mi
lucha  por  atesorarla, en los más
íntimos recovecos de mis entrañas.

No cesaré en mi afán, no pararé en
dudas vanas, levantaré el vuelo y
 allá en el cenit, desharé el pesimismo
entre mis garras. Maricarmen